La decisión de Mariano Rajoy de abrir el Congreso en el mes agosto para sacar adelante la tramitación de leyes y sus declaraciones de ser candidato a la reelección de la presidencia del Gobierno no hacen más que dar continuidad al argumento de que el trabajo y las políticas populares dan y darán sus frutos. Sin embargo, los casos de corrupción y la irrupción de nuevos partidos hacen que una corriente interna requiera de renovación y caras frescas en el PP, algo que parece no ocurrirá.
La primera votación de la sesión de investidura de la candidata a la Junta de Andalucía, Susana Díaz, tendrá lugar el lunes 4 de mayo, para lo que es necesario mayoría absoluta (más de la mitad de los votos). En caso de no ser elegida, el día 7 de mayo se producirá la segunda votación, para lo que basta con mayoría simple (más síes que noes). Las “líneas rojas” que determinan el voto favorable a la líder socialista parecen no ser suficientes para asegurar el voto: por una parte, Susana Díaz considera que ha cumplido su compromiso con el cese de Griñán; y por otra parte, la oposición considera insuficiente este gesto. Por tanto, las posiciones de los partidos seguirán siendo una incógnita hasta el día de la votación, si bien la necesidad de gobernabilidad en Andalucía es cada vez más acuciante.
Rajoy quiere ser candidato. Javier Casqueiro desvela en El País que si Rajoy tuviera planeados ajustes en la cúpula del PP tras las elecciones autonómicas y municipales no lo adelantaría, ya que muchos de sus barones perderían poder en sus territorios y esas derrotas abrirán una crisis en el partido. Por su parte, Mariano Calleja advierte en ABC que el Gobierno niega la mayor y niega que exista un debate interno sobre la sucesión de Rajoy. Marisa Cruz describe en El Mundo el optimismo con el que Rajoy anuncia su candidatura y afirma que no habrá cambios en el PP pese a los rumores de renovación.
La investidura de Susana Díaz sin acuerdo. Manuel María Becerro afirma en El Mundo que Podemos y Ciudadanos votarán contra la investidura de Susana Díaz pese al paso atrás de Griñán, lo que supone un frenazo al optimismo de la líder socialista. Por el contrario, Lourdes Lucio opina en El País que los socialistas se muestran optimistas ya que la investidura debe producirse antes del 8 de mayo, día en que comienza la campaña de las elecciones municipales y autonómicas. Jaime González considera en ABC que Susana Díaz mueve ficha y traslada a Pedro Sánchez la responsabilidad de cesar a Manuel Chaves.